La mirada interior de una joven cineasta

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No frente a su cara aniñada sino escuchando su voz en el teléfono, antes de su visita a Paraná donde realizará un casting para su próximo film, EL DIARIO dialogó con Celina Murga, la discípula de Scorsese.

Ella es paranaense y joven. Cineasta. Dos de sus películas Ana y los otros (filmada en Paraná y Victoria) y Una semana solos, han tenido una gran aceptación a nivel internacional, que incluye premios.
Recibió una beca de la Iniciativa para las Artes y las Ciencias de Rolex, para trabajar durante un año con Martin Scorsese.
Actualmente está terminando de editar un documental sobre la Escuela Normal y hoy llega a Paraná para realizar un casting para su nuevo largometraje La tercera orilla.
Cálida y amable, “con una pata” aún en Paraná, Celina Murga dialogó con esta Hoja acerca de su vocación, sus proyectos, sus experiencias…
“En los últimos tres o cuatro años de la secundaria tenía una muy amiga mía con la que nos encantaba ir al cine. No había algo muy específico, sólo me gustaba el cine y después tuve esta idea. O sea, había vocación pero no una razón muy determinada”, cuenta acerca de su vinculación con el cine.

— ¿Hay alguna cuestión que puedas definir con palabras que te siga atrayendo para filmar historias de acá, o se trata de las raíces?
— La película Una semana solos no se filmó allá (por Entre Ríos) sino en un country en Buenos Aires. Pero hay algo de la ciudad más urbana que inevitablemente no me atrae demasiado, por algo lo vengo esquivando. Me parece que por un lado hay algo que tiene que ver con las raíces, como vos bien decís, y por otro considero que está bueno una mirada más global. Tengo la posibilidad, por haber nacido ahí, de contar historias con un punto de vista más cercano. Me pasa que veo películas filmadas en el interior pero que la mirada sobre ese lugar carece de empatía con el lugar. En ese sentido me parece políticamente correcto filmar desde la cercanía. Político en el sentido de reivindicar también el lugar y lo que pasa en el lugar con la mirada interna.
— ¿Cómo te atrapa una historia?
— Los disparadores son variados, puede ser una vivencia. En el caso de Una semana solos y de este proyecto tiene más que ver con algo que vi afuera, con una noticia. Puede ser un libro o un hecho y a partir de eso –en el trabajo de guión– empezar a descubrir cuáles son los elementos de ese hecho que me interesa contar. En el caso de Una semana solos tiene que ver con la vida de los countries y en el caso de este proyecto tiene que ver con una noticia que me hizo pensar en cómo es vivir en una ciudad chica, aislada de la mano de dios, ver qué pasa con la vida de ese personaje y la sociedad que lo rodea.

TRABAJAR CON CHICOS. “Soy de la idea de que los chicos, por más que tengan mucha experiencia actoral, no dejan de ser chicos. Me gusta tratarlos como chicos y no como actores. Por una cuestión de respeto a la edad. Por más que tenga experiencia, no lo corro del lugar de chico”.

PERFIL DEL BUSCADO. “Queremos encontrar ese chico que tenga elementos para aportar vinculados con el mundo del personaje”.
Y brinda una especie de decálogo. “Una de las cosas más importantes es que cuando vienen al casting les decimos que sean ellos. Lo mejor que puede pasar es que se muestren como ellos mismos lo más posible. Es una charla, algo muy simple, algo muy humano”.
Luego de que el joven protagonista es elegido hay un proceso de entrenamiento actoral que tiene que ver con prepararlo para estar frente a la cámara.
“La adolescencia es un lugar que me interesa mucho. Ellos de alguna manera reflejan el mundo que los rodea, en alguna medida uno está hablando del mundo de los adultos, pero a través de ellos. Ellos viven en un mundo que está fabricado por los adultos y en este punto no tienen la posibilidad de transformarlo. Es una mirada importante sobre el mundo de los adultos”, analiza.

LA NUEVA PELÍCULA. El proyecto que trae a Celina Murga a su Paraná natal es que está buscando el protagonista para su nuevo largometraje que se llamará La tercera orilla. “La película se va a filmar entre marzo y abril del año que viene. En este momento estamos buscando a los protagonistas: el padre y el hijo adolescente. El padre es un actor de Buenos Aires, pero no puedo dar el nombre porque no está confirmado”.
“Estamos definiendo la ciudad donde se va a filmar, muy posiblemente sea Concepción del Uruguay. Estamos en la última etapa de completar la financiación para arrancar a filmar en marzo”.
A respecto adelanta que el largometraje probablemente cuente con un subsidio del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), “porque el proyecto tiene su solidez, tenemos un respaldo muy importante de Scorsese que nos está ayudando a buscar apoyo económico y de un productor que aportará fondos alemanes”.

La cineasta

Celina Murga nació en Paraná en 1973. En 1991 llega a Buenos Aires donde estudió fotografía y luego dirección de cine en la Universidad del Cine. Entre los años 1996 y 2004 escribió y dirigió varios cortometrajes: Interior-Noche; Frío afuera y Una tarde feliz (este último en codirección con Juan Villegas).
En 2003 escribe y dirige su ópera prima Ana y los otros, rodada en Paraná y Victoria, película que obtuvo muy buena repercusión nacional e internacional. En 2008, Una semana solos, su segundo largometraje, sigue el mismo camino internacional siendo ganadora de varios premios locales e internacionales.
En 2009 es elegida por el reconocido director y productor norteamericano Martin Scorsese para pasar un año como discípula junto a él, a través de la Iniciativa para las Artes y las Ciencias de Rolex.
Actualmente está terminando Escuela Normal, un documental filmado enteramente en la Escuela Normal de Paraná.

Scorsese

— La pregunta era ineludible, pero vos lo nombraste primero…
— (Risas)
— ¿Cómo fue trabajar con Scorsese?
— ¡Fue buenísimo! ¡Fue alucinante! Ver, presenciar su trabajo, su manera de trabajar con el resto de su equipo. Encontrar una persona muy generosa y a la vez muy cuidadosa de no imponer nada. Estaba muy atento a mi laburo, opinando todo el tiempo un montón, pero aclarando que quería opinar en la línea de mi cine sin imponer nada.
El estilo que él tiene y el que tengo yo son re-distintos, de hecho creo que eso fue lo que motivó que me eligiera como discípula. Es muy respetuoso y valora mucho la diversidad. Fue muy lindo ver eso. Él se cuidaba que lo que me estaba diciendo tuviera que ver con la línea narrativa que estaba desarrollando yo.
— ¿Y en qué consistía específicamente tu trabajo junto a él?
— La beca de Rolex me dio la posibilidad de estar un año –pero como hubo tan buena onda, terminó siendo más tiempo– al lado, atendiendo la filmación de su última película (igual ya filmó otra) pero era La isla siniestra. Yo estaba sentada al lado de él, literalmente, mirando todo y escuchándolo. Paralelamente a eso, –como yo escribía el guión– encontrábamos momentos donde lo leía, veía escenas, me hacía largas devoluciones y charlábamos sobre eso.
Traté de ser lo más esponja que pude y absorber lo más posible de todo lo que iba pasando.

El casting

Se buscan varones de entre 13 y 17 años, con o sin experiencia actoral. La selección se realizará hoy, de 14 a 18, y mañana, de 14.30 a 18, en el Centro Cultural La Hendija, Gualeguaychú 171.

“En los últimos años ha habido un crecimiento muy atractivo de la actividad audiovisual en Entre Ríos. Que cada vez haya más personas contando historias allá, que gente en más lugares del mundo pueda ver historias contadas en localidades pequeñas y no que todo lo que se vea sea Buenos Aires me parece muy importante”.

“En este momento estoy editando un documental sobre la Escuela Normal, o sea que sigo repitiendo la necesidad y las ganas de contar historias de allá”.

Publicado por: El Diario de Paraná.